La Fecha Especial

Yacía sobre el suelo, inmóvil y replegado en su caparazón. Él lo movió para evitar pisarlo, pasó por encima de la conchita terrestre reprimiendo su extenso deseo de tomarlo y llevarlo a casa.

Había subido al camión y se dio cuenta que en la escuela no enseñan como bajarse de uno. Descubrió el arte del transporte público y ya no supo como bajarse de éste. Cuando regresaba sintió una piedra en su camino y continuó su paseo inmutado, pero se dio cuenta que había matado al caracol.

¿Fue acaso el destino? El intentó no matarlo pero el camino los pudo dos veces en el mismo carril.